La Apicultura y la Meliponicultura como Estrategia para Mejorar la Calidad de Vida y Conservación de los Ecosistemas en Guatemala

Inicio » Noticias » Programa Humedales Altoandinos » Reservas de agua disponibles desde las montañas hasta el mar » Resiliencia comunitaria » La Apicultura y la Meliponicultura como Estrategia para Mejorar la Calidad de Vida y Conservación de los Ecosistemas en Guatemala
Noticias

Caserío Pochol, Aldea Xejuyub, Nahualá, Sololá, Guatemala – Fruto de un esfuerzo conjunto en el marco de la Alianza por la Resiliencia (PfR por sus siglas en inglés) entre la Asociación Vivamos Mejor (AVM), socio local de CARE, y Wetlands International, los apicultores de 17 comunidades indígenas de los municipios de Nahualá y Santa Catarina Ixtahuacán del departamento de Sololá, fueron dotados con equipos modernos para fortalecer la actividad apícola y la meliponicultura (crianza de abejas nativas sin aguijón). De esta manera, no solamente se mejora la calidad de vida de las familias involucradas, sino también se contribuye a la conservación de los ecosistemas y sus servicios.

Los equipos fueron entregados el pasado 29 de octubre en una ceremonia en el caserío Pochol, Aldea Xejuyub, Nahualá. La dotación de los equipos es parte del microproyecto denominado “Fortalecimiento de la producción apícola y de la meliponicultura con enfoque sostenible”, de la Asociación Vivamos Mejor (AVM), siendo el socio local de CARE -, y Wetlands International con la Asociación de Apicultores de la Microcuenca del Río Mazá –APICMA-.  

Las comunidades y la apicultura

Las 17 comunidades indígenas beneficiarias están ubicadas en los municipios de Nahualá y Santa Catarina Ixtahuacán del departamento de Sololá, territorio de la microcuenca hidrográfica del Mazá, que a la vez es parte importante de la cuenca alta del río Nahualate, de la vertiente del Océano Pacífico de Guatemala.

La asociación APICMA integra en la actualidad a 40 familias apicultoras de la etnia maya K’iche’, todas en condiciones de pobreza y pobreza extrema que dependen de actividades agrícolas, especialmente de subsistencia, por lo que la apicultura y la meliponicultura constituyen una oportunidad para el fortalecimiento de su calidad de vida, con incidencia directa en la conservación de los ecosistemas relacionados.

El equipo dotado

El proyecto fue financiado por Wetlands International, proveyendo recursos que permitirán tecnificar y fortalecer la actividad apícola y de meliponas. Los recursos otorgados son:

  • 1 estampadora de cera apícola
  • 3 extractores de miel a través de fuerza centrífuga
  • 3 mesas desoperculadoras para la extracción de miel y resguardo de la cera.
  • 15 cepillos de uso apícola
  • 15 espátulas para remoción de cera y de marcos
  • 15 ahumadores
  • 15 guantes apícolas, que junto con los ahumadores darán mayor seguridad en las tareas de mantenimiento

Aumento en la producción y calidad

Con este equipo, se espera elevar la calidad de la miel que se produce ya que el proceso de extracción y estampado de la cera se hará de manera mecánica y no manual como se hacía antes. Así mismo, se espera un incremento entre el 10 a 20 % de producción anual de miel (actualmente se producen 153 toneles de miel al año), producto de las buenas prácticas apícolas y el incremento de los apiarios existentes, con especial énfasis en las meliponas. Todas estas metas redundarán en mejores ingresos para las familias involucradas ya que además del incremento de la producción, también se ahorrarán los costos directos e indirectos que les implicaba estampar la cera en otros departamentos.

Además, en conjunto con la Asociación Vivamos Mejor (AVM) y el programa apícola de MOSCAMED, institución oficial encargada del control y erradicación de la Mosca del Mediterráneo en el territorio guatemalteco, se desarrollarán capacitaciones en el manejo del equipo, en buenas prácticas apícolas y la reproducción y fortalecimiento de las abejas meliponas, esto último con la finalidad de contribuir con la conservación de la fauna local de la región.

La comunidad acumula un aporte significativo, consistente en su mano de obra, el valor de los apiarios con que cuentan y los recursos locales necesarios para el desarrollo de este microproyecto.

Conservación de los ecosistemas y otros beneficios

El microproyecto busca fortalecer la actividad apícola y la meliponicultura de la microcuenca del Mazá, mediante asistencia técnica y dotación de equipo y recursos necesarios, con la finalidad de no solamente mejorar la calidad de vida de las familias involucradas, sino también la conservación de los ecosistemas y servicios relacionados. Además, por ser parte del programa de la Alianza por la Resiliencia en Guatemala, el microproyecto contribuye de manera directa a la implementación del enfoque integral de la reducción del riesgo de desastres (RRD), la adaptación al cambio climático (ACC) y el manejo y la restauración de los ecosistemas (MRE) a través de lo siguiente:

  • La diversificación de actividades y medios de vida reduce los riesgos económicos de las familias.
  • El  incremento de la producción y de los ingresos, beneficia a la estabilidad económica y seguridad alimentaria de las familias, y fortalece la economía familiar y comunitaria.
  • La polinización que desarrollan las colonias de abejas y las meliponas contribuye al mantenimiento de los ecosistemas y agroecosistemas.
  • La conservación y rescate de especies nativas (género Melipona), es parte del rescate de conocimientos y valores ancestrales y medicinales que conllevan.
  • Las abejas meliponas, son muy sensibles a la deforestación ya que anidan casi exclusivamente en árboles vivos, por lo que con este tipo de abejas los productores estarán más sensibles a proteger y conservar las especies de árboles y por ende a conservar los ecosistemas.
  • Se mantienen y recuperan los ecosistemas, principalmente con especies forestales y no forestales (como Caspirol, Chalum, Canoj, Cacho de venado, Café, Palo de agua, entre otras) que tienen floración la mayor parte del año y que son utilizadas por las abejas por ser especies melíferas.
  • Con la conservación del bosque, se asegura la fuente de alimento y de material para las abejas y se contribuirá con la conservación de suelos susceptibles a deslizamientos, lo que disminuirá los riesgos a desastres en las comunidades.